El yeso es un mineral que mayormente se origina en el mar, cerca de zonas volcánicas, debido a la combinación del ácido sulfúrico con minerales que contienen calcio.
Este mineral tiene un color muy particular ya que es un blanco algo verdoso uo en otros casos algo castaño, y es constituído por sulfato cálcico, el cual es utilizado para infinidades de propósitos debido a sus grandes beneficios y características. Una de ellas y muy importante, es que es un material incombustible, lo que quiere decir, que no es inflamable, lo cual lo hace ser un excelente material para aplicar dentro del hogar, en construcciones, hechura de vasijas, tizas, entre otros.
Lo cual no quiere decir que sea el yeso indicado para colocar en una faja. Se aclara esto, debido a que muchas personas se aplican este tipo de yeso para mejorar su figura y no obtienen los resultados deseados, y terminan por descartar las fajas de yeso pensando que no dan los resultados que las mismas ofrecen.
Para aclarar todas sus dudas, el material utilizado en estás fajas está compuesto de diferentes concentrados naturales, su nombre es » yeso lipolítico» el cual tiene como función conservar y aumentar el calor corporal, debido a esto, ayuda a reducir el volumen de grasa corporal, lo cual convierte a esta faja en lo más ideal para adelgazar, y no solo se trata de esto, lo más importante aparte de adelgazar el abdomen y la cintura, es que disminuye favorablemente las celulitis y la flacidez que generalmente quedan después de una perdida de peso.
La faja de yeso actúa de manera no invasiva y sus resultados se obtienen de forma rápida y eficaz.
¿Cuál es la diferencia entre la faja de yeso y la yesoterapia?
La faja tiene un diseño ergonómico el cual se puede ajustar al cuerpo con cintas elásticas o cordones de amarre, y tiene una gran ventaja, que se puede retirar para ducharse o para dormir, y luego volverse a colocar. A diferencia de la yesoterapia que se aplica con vendas y queda fija hasta el momento de retirarla.
